Ali, de 25 años, ha conseguido obtener su licencia finalmente durante una reunión con la Junta el 9 de mayo de 2018, gracias a su equipo, formado por su entrenador, Alex Matvienko, su endocrinólogo, Dr. Ian Gallen y su apoderado, Asad Shamim. Juntos proporcionaron documentación clave para demostrar que la diabetes de Ali no afectaría a su capacidad de boxeo.
A principios de este mes, Diabetes Voice tuvo la oportunidad de hablar con Ali sobre la vida con diabetes tipo 1, el boxeo y su lucha por competir en el deporte que ama.
¿Cuándo te diagnosticaron diabetes? ¿Puedes hablar sobre lo que sucedió, dónde te diagnosticaron y si pasaste tiempo en el hospital?
Me diagnosticaron diabetes tipo 1 a los cinco años en el Reino Unido. Me sentía débil y deshidratado, iba constantemente al baño a orinar debido a que mis niveles de azúcar estaban altos. Un día sufrí una hipoglucemia y la ambulancia llamó por teléfono a mis padres, que tuvo como resultado mi traslado al hospital, en donde me dijeron que me habían diagnosticado diabetes. Los médicos me mantuvieron en el hospital durante una semana más o menos y realizaron controles regulares. Los facultativos educaron a mis padres sobre la diabetes y cómo controlar mis niveles de azúcar, como por ejemplo qué alimentos sería mejor consumir.
¿Qué tipo de herramientas usas para controlar la diabetes tipo 1?
Actualmente, estoy usando un monitor continuo de glucosa (MCG) para controlar mis niveles glucémicos. Esto ha hecho que me sea extremadamente fácil tomar el control y gestionar mi diabetes cuando estoy en el ring. Lo uso 24/7.
¿De qué tipo de alimentos dependes para tu entrenamiento y tu diabetes?
Consumo comida casera que me preparo yo mismo. Por ejemplo, peso mis raciones de carbohidratos, proteínas y grasas, para así saber exactamente cuánta insulina necesito inyectarme (jeringuilla). Un ejemplo de una cena típica sería 200 g de pechuga de pollo, 75 g de arroz, 50 g de brócoli y 1 litro de agua.
¿Cuándo empezaste a boxear? ¿Por qué?
Empecé a boxear a la edad de 12 años. He practicado deporte desde los cinco años. Por ejemplo, he participado en clubes regionales de karate, fútbol, cricket y rugby. ¡En estos deportes cuando éramos derrotados yo podía culpar a otros miembros del equipo por perder! Sin embargo, en el boxeo no puedo culpar a nadie por una derrota excepto a mí mismo. Siempre he sido competitivo en todas las actividades deportivas. El boxeo ha sido mi deporte favorito. Siento una gran pasión por el boxeo y he encontrado mi sitio. ¡También odio ser derrotado! El boxeo me da una sensación de control individual.
Cuando estás entrenando, ¿qué es lo más difícil de vivir con diabetes tipo 1 y hacer ejercicio en el gimnasio/ring?
He vivido con diabetes durante 20 años y creo que, debido a esto, no puedo decir que haya nada que me resulte realmente difícil. A veces, mis niveles glucémicos aumentan y los reviso con bastante frecuencia gracias a mi CGM. Cuando es necesario, tomo una dosis de corrección para equilibrar mis niveles glucémicos. Sé cómo y cuándo controlar mi diabetes, lo que me permite llevar una vida sana.
Cuando te dijeron que no podías obtener una licencia para ser boxeador, ¿qué pensaste y cómo te sentiste? ¿Qué te hizo querer luchar contra la decisión?
Me rompió el corazón por completo cuando me dijeron en 2015 que no podía obtener una licencia de boxeo profesional debido a mi diabetes tipo 1. ¡Me sentí discriminado y alienado!
Las razones que me llevaron a luchar contra esta decisión fueron, en primer lugar, que soy un diabético saludable, lo que me permite alcanzar mis sueños. En segundo lugar, que soy un buen boxeador. Y, en tercer y último lugar, la razón más importante: la Junta Británica de Control de Boxeo estaba contraviniendo la legislación sobre igualdad.