Las condiciones de diabetes y complicaciones relacionadas imponen costos individuales y en familia, para las empresas, las instituciones y los seguros médicos públicos y privados. Ya existe en América Latina Central y Sur diversidad de programas en educación sobre la diabetes ofrecidos por organizaciones públicas y privadas. Por lo general, los contenidos son elaborados y el aprendizaje se enfoca solo en que las personas adquieran conocimiento.
Con las personas con enfermedades crónicas como la diabetes, el diagnóstico implica cierta frustración y el tratamiento descansa en gran medida en su destreza y motivación, y así una situación de aprendizaje. Se presentan nuevos desafíos en el cuidado y la prevención a los proveedores de salud y un “saber hacer” más allá de la actualización clínica para ser eficaces en facilitar aprendizaje activo y nuevos estilos de vida en su trabajo con personas con diabetes.
La colaboración en grupos juega un rol esencial
El significado de enseñar ha cambiado fundamentalmente. Howard Gardner, de la Universidad de Harvard, y sus homólogos demuestran que el tradicional concepto de transmitir conocimiento se está reemplazando por procesos cognitivos basados en aprendizaje activo con el uso de inteligencias múltiples. Carl Wieman, de la Universidad de Stanford, y muchos colegas que experimentan estilos de educación, nos indican que la apropiación interna en el individuo y la experimentación de solución de problemas, son los que generan cambios sostenibles en la eficacia personal, en la motivación hacia metas de vida y en la maduración de competencias de aprendizaje continuo. La colaboración en grupos juega un rol esencial para cambiar de la recepción inefectiva de enseñanza de la educación tradicional – hacia el aprendizaje activo y seguimiento – el “outcome” de empoderamiento de aprendices.
Hemos iniciado con una de las múltiples tareas metafóricas de interacción disponibles en dos encuentros de capacitación mensuales de la asociación Dia Vida en Costa Rica. Compartimos aquí el desarrollo
¿Cómo se ha creado un escenario de aprendizaje?
Acordamos entre el grupo sobre las métricas de salud que son predictores importantes para el control y la prevención de diabetes. Son comportamientos controlables – mantener el peso saludable, comer sano y estar físicamente activo y otros son datos en niveles saludables: la presión arterial, el colesterol y la glicemia. Reflejamos: “Como siempre, todo está bien conocido. Estos elementos son como estos bloques resueltos en el piso. ¡No cambiaría nada hasta que colaboramos todos para integrar estos elementos principios en una estructura relacionada!”
¿Cuáles son objetivos y tarea?
El objetivo es construir una torre alta y segura integrando todos los principios básicos válidos para el control y la prevención de la diabetes. Se presentaron los principios. Mientras integran los principios en una torre, los y las participantes pueden comunicarse y hablar entre sí.
Los principios se presentan sobre los bloques en el piso. Los principios podrán cambiar según enfoque temático. Un participante presenta las reglas para la construcción.
¿Cómo usar la metáfora de interacción para facilitar el aprendizaje?
El grupo entiende su habilidad de construir la torre usando la grúa en conjunto e inicia la construcción. Aun con toda la energía inicial se caen dos bloques, el sobre “comer sano” y el otro sobre “peso regular”. ¡Qué situación paralela y parecida a la vida cotidiana! … y todos recuerdan el esfuerzo necesario para lograrlo. Se bajan las cuerdas de la grúa. Preguntamos: “¿Recuerdan? Había un grupo trabajando para integrar principios en una torre, y fracasaron… Y ahora ¿Qué podemos aconsejar a este grupo y como deberían avanzar?”
El grupo contesta reflexionando, colectamos comentarios como el grupo debería continuar: En fin, el grupo se aconseja a sí mismo y sigue construyendo con éxito hasta tener la torre alta y segura, ¡todos los principios son integrados y se celebra el éxito de salud!
Se ha demostrado la alternativa didáctica para iniciar aprendizaje activo. Todos celebraron el éxito basado en habilidades comunicativas como “escuchar”, “manifestar empatía” y “elogiar el esfuerzo”.
La educación sobre la diabetes cuenta con la gran ventaja que el éxito de su labor es directamente relacionado con indicadores numéricos y fácilmente medibles antes, durante y en seguida de un programa de educación sobre la diabetes. Esta actividad demostró que el aprendizaje colaborativo se produce en toda situación en la que dos o más personas intenten aprender algo juntas.